"Este tema es la continuación a manera de estudio, versículo por versículo. Que me he propuesto compartirles en este caso sobre la epístola de Romanos, pues soy fiel creyente que en Dios siempre hay nuevas cosas que hacer, ya que él es quien pone en nosotros el querer y el poder, de esta forma este blog toma un giro importante pero todo con el propósito de hacer llegar hasta ustedes la Palabra de Dios de manera sana y fresca."
Romanos 3:10 Así está
escrito: No hay un solo justo, ni siquiera uno.
Introducción
No hay necesidad de
llamar a un médico a no ser que uno se encuentre enfermo, tampoco hay necesidad
de buscar a un Salvador si uno no está perdido, el Apóstol Pablo nos muestra
aquí que el hombre está perdido. Pablo termina su tema sobre el pecado
llevando a la humanidad ante el juez de toda la tierra y el veredicto de
culpable lo hará Dios mismo contra toda la humanidad, contra judíos y gentiles,
blancos y negros, hombres y mujeres, pobres y ricos, no hay ninguna diferencia
en cuanto quien es usted; si usted pertenece a la raza humana ya es culpable
delante de Dios, luego Pablo nos llevara al hospital de Dios, este es un
hospital espiritual, allí el gran medico nos observara. Primero se nos hace 14
acusaciones, 8 ante el gran juez y 6 para declararnos enfermos, tan enfermos
que estamos al borde de la muerte, aunque la verdad debemos aceptar que estamos
muertos en delitos y pecados, esa es nuestra condición.
Romanos 3:10 Así está escrito: No hay un
solo justo, ni siquiera uno. Esta
es la primera acusación del Juez de la tierra, hacer el bien y ser justo es realmente lo mismo, pero acá vemos
que no hay ni un solo hombre que cumpla esta medida, ser justo significa estar
bien con Dios conforme a su voluntad, estar bien con Dios es totalmente
diferente a estar bien con los hombres; si quiere estar bien con Dios debe
hacerlo según las normas de él, la Salvación es algo que tomamos o dejamos.
Dios no obliga a nadie a aceptar su Salvación, usted la puede aceptar o
rechazar; Dios dice este es mi universo yo he trazado un plan que esté de
acuerdo con mi carácter y mi naturaleza Santa este es mi plan y mi programa
para la humanidad, este es el método de Salvación que les ofrezco, eso es lo
que nos dice a toda la humanidad ¿Quiere ser Salvo de la condenación? La
decisión final es suya, entonces “estar bien” realmente significa estar bien con Dios, no es el
ser humano el que hará las reglas y normas para estar bien, no es así, Dios ha
hecho las normas para estar bien con él. Romanos
3:11 No hay nadie que entienda, nadie que busque a Dios. Acá vemos la
segunda acusación “no hay
quien entienda” en otras palabras es como decir que no hay nadie que actúe
según el conocimiento que tiene, Dios nunca se ha escondido del hombre. Dios se
ha revelado; al recordar las palabras de Pablo en la ciudad de Atenas podemos
ver como Dios siempre tiene un mensaje para la humanidad. Hechos 17:30 Pues bien, Dios pasó por alto aquellos tiempos de tal
ignorancia, pero ahora manda a todos, en todas partes, que se arrepientan. Hoy
en día Dios no está pasando por alto los pecados de la humanidad, “nadie que busque a Dios”
la religión podrá decir que el hombre si está buscando a Dios, dado el hecho
que la religión es el método por el cual el hombre trata de encontrar a Dios;
pero la verdad es que aún no lo ha encontrado porque va por mal camino, por el
de la religión, la realidad es que el hombre se está apartando de Dios.
Romanos 3:12 Todos
se han descarriado, a una se han corrompido. No hay nadie que haga lo bueno; ¡no
hay uno solo! Acá tenemos la tercera acusación y es que la humanidad se ha desviado, dejó
el camino que era correcto, esta parte está dirigida a todo aquel que sabe que
no está haciendo lo que es correcto y peor aún no lo va hacer aunque sabe que
es lo correcto, así es la humanidad, “a una se han corrompido” esto es realmente ser inútil, la
humanidad sin Dios se ha echado a perder, como una fruta podrida que ya no
sirve para nada, el hombre no es una fruta jugosa sino una cosa corrupta eso es
lo que el juez de la tierra dice, “no hay nadie que haga lo bueno; no hay uno solo” la humanidad
es como un grupo de viajeros que se han extraviado y por lo tanto no hay nadie
quien pueda ayudar al otro, el Señor Jesús se los dijo a los religiosos de su época.
Mateo 15:14 Déjenlos; son guías ciegos. Y
si un ciego guía a otro ciego, ambos caerán en un hoyo. Y este es realmente
el cuadro de la humanidad, eso es lo que Dios dice de la humanidad, Pablo hoy
nos traslada al hospital de Dios y acá se nos da un diagnóstico de lo que Dios
ve en nosotros.
Romanos 3:13 Su
garganta es un sepulcro abierto; con su lengua profieren engaños. Veneno de
víbora hay en sus labios. Cuando uno va al médico el medico lo primero que pide
al paciente es que abra su boca pone una paleta en la lengua y observa la
garganta. Dios el gran medico hace lo mismo con la humanidad y acá vemos lo que
nos dice, “Su garganta es
un sepulcro abierto” ¿Ha tenido la oportunidad de sentir el olor de
carne humana en estado de descomposición” cuando Dios ve al hombre que no tiene
a Dios en su corazón, Dios no dice que bella es esa persona, si nos viéramos a
nosotros mismos como Dios nos ve no pudiéramos aguantarnos, “con su lengua profieren engaños”
el medico dice: Saque la lengua y cuando Dios la ve dice: “Veneno de culebras hay debajo
de los labios” piense en la cantidad de veneno que tiene una víbora y así
es como Dios dice de aquel que no tiene a Dios en su corazón, con nuestra lengua
destruimos por los chismes que hacemos, por lo que decimos de los demás, nuestra
lengua sin Dios solo es para destruir, cuánta maldad existe en la boca humana.
Romanos 3:14 Llena
está su boca de maldiciones y de amargura. El médico sigue diciendo, este cuadro o diagnóstico
es terrible, pues el hombre tiene la inclinación a maldecir a la humanidad, le
gusta más usar un lenguaje profano que uno que adore a Dios.
Romanos 3:15 Veloces
son sus pies para ir a derramar sangre; 16 dejan ruina y miseria en sus caminos;
17 y no
conocen la senda de la paz. Qué triste diagnóstico de la humanidad se nos presenta
acá, nos apresuramos a destruir, no conocemos la paz, solo hay que observar el
mundo alrededor y nos damos cuenta de esto.
Romanos 3:18 No hay
temor de Dios delante de sus ojos. El hombre vive como si Dios no existiera y desafía
Dios, esa es la triste realidad del hombre sin Dios.
Romanos 3:19 Ahora
bien, sabemos que todo lo que dice la ley, lo dice a quienes están sujetos a
ella, para que todo el mundo se calle la boca y quede convicto delante de Dios.
Esta
declaración es la última que Pablo nos dice acerca del pecado, algunos dicen
tenemos la ley y esa es la que vamos a cumplir. Pablo se adelanta a esa afirmación
y nos dice que nadie puede tener Justificación por medio de la ley, la
humanidad no puede ir por ese camino, el hombre puede poner su confianza en la
ley, pero eso no le levantara, ni le ayudará.
Romanos 3:20 Por
tanto, nadie será justificado en presencia de Dios por hacer las obras que
exige la ley; más bien, mediante la ley cobramos conciencia del pecado. Uno podría desafiar
a cualquier persona que cree que guardando la ley y que puede ser salvo por
medio de ella, a que explique qué es lo que dice este versículo, este versículo
dice que ningún ser humano podrá ser declarado Justo, ni Salvo, ni cumplir las
normas de Dios por medio de las obras de la ley, es imposible para la humanidad
hacerlo.
Romanos 3:21 Pero
ahora, sin la mediación de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, de la
que dan testimonio la ley y los profetas. Hemos llegado a la división entre el pecado y la
maravillosa gracia de Dios, la eficacia de la justicia de Dios para un mundo
culpable y enfermo, esta justicia de la que se habla no es la que se refiere al
atributo de Dios, tampoco se refiere a la justicia del hombre, esta justicia es
de Dios y él mismo la provee. Cristo llegó a ser nuestra justicia. 1º Corintios 1:30 Pero gracias a él ustedes
están unidos a Cristo Jesús, a quien Dios ha hecho nuestra sabiduría es decir,
nuestra justificación, santificación y redención. También nos dice en 2º Corintios 5:21 Al que no cometió pecado
alguno, por nosotros Dios lo trató como pecador, para que en él recibiéramos la
justicia de Dios. Lo más importante es que reconozcamos que es Dios quien
provee esta justicia, nos es algo que usted y yo podamos hacer, sino algo que
Dios ha provisto para nosotros, es una Justicia que Dios demanda pero que también
el suple; esta es una Justicia aparte de la ley, eso significa que no se puede
obtener haciendo algo o guardando ciertas reglas. Dios no puede salvar a nadie
por medio de la ley por la razón que nadie la puede cumplir, Dios no puede aceptar
cosas imperfectas y ni usted ni yo podemos proveer la perfección, es por eso
que no nos salva por la ley, aun en el Antiguo Testamento en el tabernáculo donde
se hacían los sacrificios que eran la figura de la Justicia que un día sería
revelada por medio de Jesucristo se lograba tal Justicia, a eso se refería Isaías
en el Antiguo Testamento. Isaías 53:1 ¿Quién
ha creído a nuestro mensaje y a quién se
le ha revelado el poder del Señor? (v6) Todos andábamos perdidos, como ovejas;
cada uno seguía su propio camino, pero el Señor hizo recaer sobre él la
iniquidad de todos nosotros. (v10) Pero el Señor quiso quebrantarlo y hacerlo
sufrir, y como él ofreció su vida en expiación, verá su descendencia y
prolongará sus días, y llevará a cabo la voluntad del Señor. La ley y los
profetas testificaron de esta Justicia que Dios proveería por medio de
Jesucristo.
Romanos 3:22 Esta
justicia de Dios llega, mediante la fe en Jesucristo, a todos los que creen. De
hecho, no hay distinción. Hay algunos que piensan que la Gracia de Dios
desciende sobre la humanidad como si descendiera por medio de un tubo, esta
Gracia la necesitamos todos, llegamos a estar completos en él, somos salvos en
él, esa Justicia es la que el provee por medio de su Gracia; todo esto es en
Cristo; pero fuera de él estamos completamente perdidos, no hay términos medios,
no existe tal lugar, está en Cristo o tiene la Justicia de Dios o está
condenado a la perdición eterna en el infierno, “de hecho, no hay distinción” esta Gracia es para
todos, nadie está en mejor condición que otro, sino ha recibido a Cristo como
su Salvador.
Romanos 3:23 pues
todos han pecado y están privados de la gloria de Dios. Se refiere a que
todos hemos pecado, esto nos dice quiénes somos nosotros, esa única diferencia solo
existe cuando el hombre acepta a Cristo en su corazón, eso es como si hiciéramos
un concurso para ver quien toca la luna de un solo salto y así lo lograra ser Salvo,
lo primero que ocurriría es que nadie lo lograría, lo segundo es que aunque
unos saltan más que otros todos al final estarán sin Salvación, pues no se
trata de quién salta más sino de quien la logre tocar, así es en el plan de
Dios; ningún humano es mejor que otro ni nadie puede emplear sus propios métodos
solo hasta ver hacia Cristo y recibirle y arrepentirnos, esa carga, esa culpa y
ese castigo es borrado a través de la Sangre Preciosa de Jesús derramada en la
cruz del calvario, nadie alcanzar la gloria de Dios sin Cristo, Dios ha dado
esa Justicia a la humanidad y debemos aprovechar ¿Ya aprovecho lo que Dios le
ha dado? Eso lo recibe por fe, no se puede obtener por liturgias, ni obras,
solo por la fe se recibe, acuda hoy mismo al hijo de Dios y recíbelo como tú Único
Y Suficiente Salvador Personal, verá que nunca se arrepentirá de haberlo hecho
y así obtendrá la Justicia de Dios, el perdón y su pase al reino de los cielos,
espero en Dios que tome la mejor decisión.
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